“Aguchita” sigue sembrando buenas noticias en Perú

Religiosa del buen pastor, será beatificada en mayo próximo

Aguchita Perú

Pese a que una bala atravesó su cerebro, “Aguchita” vive. La noticia quedó desvelada un 27 de setiembre de 1990, cuando su corazón estalló, pero de amor. Y es que desbordaba de aquel sentimiento, casi a diario, cuando con alegría y sazón, solía compartir la preparación de dulces rodeada de niños en La Florida, en la Selva de Junín (Perú), lugar donde al realizar su misión encontró la muerte.

Natural de Coracora provincia de Ayacucho, María Agustina de Jesús Rivas López, religiosa de Nuestra Señora de la Caridad del Buen Pastor, se convierte así en la “buena noticia”. Hija de los “Andes peruanos”, es la mujer que pone en acción el amor en su total dimensión. Así se narra en el reciente libro Aguchita: “La muerte no se improvisa, el amor es nuestra vocación”, escrito por el presbítero Luis Alfonso Tapia Ibañez, encargado de escuchar los testimonios de los testigos incluidos en el proceso de beatificación.

La alegría de vivir del amor

Aguchita Perú

Tras lograr acopiar las principales revelaciones de quienes caminaron con la “santa de a pie” el autor de esta obra testimonial confesó que ella le habló quedo al oído para decirle “No puedes terminar lo que estás haciendo, sino intentas hacerlo”. Escribir el libro, lo conmovió y removió. “La santa de la puerta de a lado”, como destaca el papa Francisco (en su exhortación apostólica Gaudete et Exsultate), -me habló-. -Yo solo tenía que obedecer- contó durante una entrevista para Exaudi.

La obra describe los momentos vividos en el corazón de la selva central a 727 m s.n.m. en el hábitat de las naciones amazónicas, pueblos originarios, Nomatsigengas, Yaneshas y Ashaninkas, por quienes María Agustina gastaba la vida. Desde remendar, o preparar abono con restos de cáscaras y hojas, hasta insecticida con ají y rocoto, cualquier aprendizaje era útil para las madres en la zona. Solía decirle a los niños y jóvenes “ la profesora no está en las escuelas sino, más bien en el hogar”. 


“Aguchita”, supo ganarse el título de maestra sin haber estudiado pedagogía, como se precisa en el libro, prologado por monseñor Salvador Piñeiro, arzobispo de Ayacucho.

La santa de las pequeñas cosas 

Aguchita Perú

Apasionada por poner en práctica la caridad. Según lo revela en el libro, la religiosa Matilde Villegas, la inquieta novicia prefería distribuir alimentos a los más pobres, en lugar de salir a tomar el fresco de la tarde, en sus horas de descanso.

Este trabajo bibliográfico fue comentado en un conversatorio donde se destacó la capacidad de la futura beata para valorar las cosas pequeñas. En este evento participó el responsable del proceso de beatificación monseñor Gerardo Zerdín Obispo Vicario Apostólico de San Ramón, el historiador José Antonio Benito, y el autor del libro el sacerdote Alfonso Tapia, así  como la superiora provincial de la congregación Marlene Acosta, y el Arzobispo de Ayacucho monseñor Salvador Piñeiro quien anunció la realización de una peregrinación hacia su ciudad natal tras su beatificación el 7 de mayo en el lugar de su martirio

“Aguchita”, la nueva beata peruana, vive en cada acto de amor hacia los más necesitados.