Bioética: Libertad de expresión, autonomía y responsabilidad

Observatorio de Bioética – Universidad Católica de Valencia

Bioética Libertad de expresión
Libertad de expresión © Alba Montalvo

El doctor Julio Tudela Cuenca del Observatorio de Bioética de la Universidad Católica de Valencia, ofrece a los lectores de Exaudi su artículo titulado “Libertad de expresión, autonomía y responsabilidad”, donde explica que la conquista y defensa de las libertades constituye “uno de los más nobles objetivos de la actividad humana”.

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La conquista y defensa de las libertades constituye uno de los más nobles objetivos de la actividad humana. Pero esta tarea no está exenta de conflictos éticos, que deben matizar y limitar su ámbito de aplicación y alcance.

Contexto

Las recientes propuestas de la sociedad posmoderna que plantean el ejercicio de la autonomía personal, y por tanto la capacidad de elección y decisión, como un derecho ilimitado, pervierten el auténtico sentido de la libertad que, entendida de este modo, lejos de contribuir a la promoción humana, favorece la desigualdad, el sometimiento, la opresión y el retroceso social.

Las recientes defensas del supuesto derecho a abortar o a solicitar la eutanasia, contrastan paradójicamente con la pretendida limitación del derecho a la libertad de expresión, cuando se trata de defender la vida y oponerse a toda forma de homicidio, como los son el aborto y la eutanasia.

Los intentos de limitar la libertad de expresión de los que se manifiestan frente a las clínicas abortistas o de los que se posicionan contra los postulados de la ideología de género o la eutanasia, no hacen sino mostrar la doble vara de medir que esgrimen los que se autodenominan defensores de la libertad.

El ámbito del ejercicio de la libertad y autonomía personales debe estar siempre limitado por la evaluación de las consecuencias que las propias elecciones tienen sobre los otros, también sujetos de derecho.


La ponderada evaluación de las consecuencias de toda opción humana, sus posibilidades de construir y no destruir, de servir y no someter, deberían marcar los límites precisos del ejercicio de las libertades, también de la libertad de expresión.

Conclusión

Ésta nunca debería coartarse cuando se orienta al bien, la edificación mutua y la defensa de la vida y la dignidad humanas, pero debería restringirse a los límites que establece el ejercicio de la solidaridad, excluyendo todo intento de ser utilizada como arma destructiva o letal.

Las libertades de elección y expresión lo son verdaderamente cuando reconocen los límites que impone el imperativo del bien común y la salvaguarda de la dignidad humanas.