Entrevista a Jaume Vives, responsable del proyecto “Vividores”

Campaña contra la eutanasia en España

Entrevista Vividores eutanasia
Lona de 500 m2 en Madrid contra la ley de eutanasia © Vividores

Jaume Vives, periodista y responsable del proyecto “Vividores”, ofrece una entrevista exclusiva a Exaudi para hablar sobre su campaña de lucha contra la Ley de la eutanasia aprobada por el Gobierno de España, el sentido del sufrimiento en la vida de una persona, la cultura de la muerte implantada en la sociedad y el valor de la familia para el futuro.

“Vividores” es un proyecto dedicado a hablar de la vida y de la muerte, de las alegrías y de los sinsabores, y areflexionar sobre el sentido del dolor y el sufrimiento. “En la sociedad en la que vivimos se escucha mucho hablar de ayuda a morir, muerte digna y buen morir. Nosotros queremos hablar de ayudar a vivir, vida digna y buen vivir”, explica su web.

En dicho portal se pueden encontrar las entrevistas completas de 12 personas que dan su testimonio, además de cuatro vídeos de expertos en la materia, una conversación sobre eutanasia con Manuel Martínez-Sellés, presidente del Colegio de Médicos de Madrid, o un espacio de últimas noticias de actualidad relacionadas.

A continuación, sigue la entrevista completa con Jaume Vives.

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Exaudi: ¿Cuándo nace el proyecto “Vividores”?

Jaume Vives: Hace más o menos un año, a finales de febrero. La Asociación Católica de Propagandistas (ACdP), que es la que impulsa el proyecto “Vividores”, iba a tratar el tema de la vida, es decir, algo mucho más amplio, no solo defender la muerte natural, sino todo lo que hay en medio. Esto es algo que muchas veces olvidamos.

Justo en ese momento el Gobierno decide abrir otro frente con la aprobación de la Ley de la eutanasia. Es entonces cuando la ACdP decide destinar parte de los recursos pensados para el tema general a algo más concreto que es la eutanasia. Ahí es donde entro yo, a finales de febrero, casi marzo. Con un grupo de amigos de la asociación, preparamos la campaña. Estudiamos cuál es el problema, qué es lo que está pasando y cómo podemos explicarlo. Es cierto que antes de que el Gobierno planteara la Ley ya estaba previsto abordar el tema de la eutanasia, pero, cuando comienzan esta guerra, nos obligan a focalizar más hacia ahí.

Exaudi: ¿Es un proyecto exclusivamente social o actúa como plataforma política?

Jaume Vives: No. Se trata de un proyecto impulsado por la Asociación Católica de Propagandistas y organizado y ejecutado por un grupo de amigos al que se han ido juntando más personas. Sí es una plataforma social en ese sentido. Hemos tenido contactos con la política para incidir en la Ley, pero como tal no es una plataforma política.

Exaudi: ¿Cómo termina Jaume Vives luchando por esto?

Jaume Vives: La historia es bastante larga y voy a intentar resumirla. Todo comienza hace varios meses con una comida para hablar sobre pornografía. Me llamó el presidente de la ACdP, Alfonso Bullón, para pedirme si podía venir a vivir a Madrid, yo soy de Barcelona, para preparar una campaña para hacer frente a la eutanasia, para tocar este tema y que llegue a la sociedad. Él se entera de que se está tramitando una nueva ley. Y aquí estoy.

Exaudi: ¿Qué sentido tiene el sufrimiento para los “Vividores”?

Jaume Vives: Los vividores son los testimonios que se pueden encontrar en la web. El concepto que uno tiene de vividor es el de una persona que vive de lujo, “a cuerpo de rey” y al que todo va genial. Nosotros hemos querido dar otro sentido a esto. Vividor es una persona que vive, pero lo hace con todo, sin censurar nada.

Vivir, a veces, es muy divertido, en ocasiones no tanto. Pero siempre se sufre. El vividor es el que vive consciente de esa realidad y la asume. Es el que ha conseguido tener una vida plena a pesar del dolor que haya podido tener. Por esto los vividores son los protagonistas. Lo que pretendíamos era hacer algo previo a la Ley, un predebate que nunca ha existido, sobre el sentido del dolor, el sufrimiento, la enfermedad y la muerte.

Esta es la experiencia compartida que tenemos todos, intentar apartar de nuestras vidas el sufrimiento, ya sea físico, psíquico, familiar o del tipo que sea. Y por mucho que lo intentamos, no lo conseguimos. Puesto que sufrimos, y siempre lo vamos a hacer, se trata de asumirlo y vivir con ello.

De eso ha tratado la campaña y por eso los vividores son los expertos, personas que han vivido acontecimientos muy graves. Por eso yo, si alguna vez vivo algo así, me encantaría hacerlo como ellos. Por eso también si hubiésemos tenido ese debate y podido reflexionar sobre ello, no ahora, 20 años tarde, sino hace varias décadas, cuando empezaba a venderse ese veneno, habría sido muy distinto el panorama sobre la eutanasia. Probablemente ni siquiera se hubiera llegado a plantear.

Debido a ello no hemos podido tener ese debate sobre el sentido del dolor. Pensamos que podemos vivir sin sufrimiento, totalmente cómodos, y todo cuando queramos y a nuestro servicio.

Exaudi: ¿Por qué parece que tenemos una política de muerte? No se educa para aceptar la realidad, que somos seres frágiles. No se fomenta la apertura a la vida, la familia o el amor a la debilidad propia y del otro…


Jaume Vives: Es un misterio la verdad. Yo tengo algunas intuiciones, pero son solo eso. Por ejemplo, en el caso de la eutanasia, yo entiendo que ahí hay varias razones por las que un gobierno puede preferirla frente a los cuidados paliativos, porque es mucho más sencilla y económica.

Es una cosa de un día, de unos pocos euros, mientras que la medida de los cuidados exige que no solo tienes que pagar los mismos, sino también la pensión y otros gastos. Son muchos años y mucho dinero. Entiendo que detrás de la Ley debe haber alguna motivación económica. Y también creo que debe haber algún cálculo electoral, porque la eutanasia se ha convertido en un sinónimo de progreso, algo moderno, una falsa compasión, para que sea un discurso que compre mucha gente y se pueda ahorrar dinero en ese aspecto.

El motivo económico es el principal, pero luego también sucede que gran parte de la población es precisamente la menos necesitada de la eutanasia, una parte social muy ideologizada que la defiende como un derecho. Es gente de apenas 30 o 40 años que vive una vida genial y se dedica a defender este tipo de “derechos” y hace mucho ruido. Entonces, ahí hay una suma de factores que han hecho que esta cultura de la muerte entre muy suave en la sociedad.

Por esto, el Gobierno tiene que satisfacer también a estas personas. Pero a quien no ha escuchado es a la gente que de verdad, por su sufrimiento, se ha planteado la eutanasia. A estas personas hemos querido llegar nosotros, no a las ideologizadas que van con la bandera y la pancarta a favor de la eutanasia. Con “Vividores” queremos llegar a esa persona que quiere “borrarse del mapa” y pide la medida no por ideología sino porque está viviendo un infierno. Queremos escucharle y ayudarle, y decirle que su vida sí tiene un sentido. Pero queremos que se lo diga la gente que está pasando por su misma situación.

El Gobierno no ha escuchado a esta gente, que después de unos cuidados paliativos dignos y bien aplicados no quiere morir. Ese deseo desaparece en el 99,9% de los casos. La gente quiere que se el cuide, se le acompañe y se le consuele. El Gobierno no ha escuchado a nadie, ni a los que sufren, ni tampoco a los médicos ni expertos en bioética. Por eso quizás es tan tenebroso: Si vas a legislar sobre la muerte, qué menos que escuchar a los expertos en la muerte, a la gente que está muriendo, a los paliativistas. Si evitas esto, es imposible que salga nada bueno.

Exaudi: Este sufrimiento toca precisamente el sentido de la vida de una persona. Por ejemplo, en los países del norte de Europa se tiene tan asumida la eutanasia que la vejez se considera como un estorbo para el colectivo.

Jaume Vives: Es lógico que sea así. Si como sociedad hemos aceptado que hay vidas que son menos dignas, por ejemplo por algo físico (pronto será por un motivo mental, después por una depresión leve y llegará el día en que sea por una mala temporada en el trabajo), ¿por qué, en un futuro, no va a ser el Estado el que lo decida por nosotros, o unos vecinos?.

Por qué no llegaremos a decir: “Oye, no seas tan cruel de mantener con vida a tu padre que está enfermo, ¿por qué no lo matas?”. Es una falsa compasión. Y es lo mismo que pasará con el aborto. Yo creo que en unos años, lo veremos, habrá una presión social mucho más salvaje que la de ahora contra aquellas personas que, por ejemplo, vayan a atener un hijo con Síndrome de Down y se les diga que todos los gastos los asumen ellos o que no puede nacer.

Por eso es lógico que pase. Nosotros mismos como sociedad hemos votado en este sentido, basados en unos criterios de comodidad. Pero llegará un día en que el Estado decidirá por ti en base a unos criterios de eficiencia.

Exaudi: El pobre, que es el que más sufre, no se plantea esta opción. En Occidente, tenemos tantas cosas, que nos otorgamos la potestad de relativizar el sentido de la realidad.

Jaume Vives: Lo dice la Biblia: “Es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja, que un rico entre en el Reino de los Cielos”. No quiere decir que el rico sea malo de por sí, sino que el mucho tener, poseer y controlar a veces nos aleja de la realidad. Nos hace creer que somos una suerte de dioses que pueden vivir apartando el dolor de sus vidas, sin necesidad de doblegarse ante nada, con la cultura de la inmediatez.

En esa cultura de gente débil, en la que no hay sacrificio por nada ni nadie, lo normal es que cuando te rompes una uña quieras morirte, y es lo que ha pasado.

Exaudi: ¿Crees que esto va a explotar? ¿Dios tiene un plan?

Jaume Vives: Por ahora no soy profeta. Lo que sí se ve es que hay pequeñas respuestas y reacciones de grupos de gente que hacen cosas para enfrentarlo. Los caminos del Señor no los conozco, pero hay que entender, humanamente, que esta batalla va a durar muchos años.

Para que lo entendamos: El Mal ha estado muchos años trabajando para que veamos la eutanasia como un acto de misericordia, cuando realmente es la mayor de las crueldades. Es mucho tiempo trabajando para engañarnos y hacernos creer esto.

Entonces, nosotros tenemos que hacer lo mismo, no para engañar, sino para mostrar la verdad y hacer que brille. Luego, los caminos de Dios no sé por dónde irán, pero nuestra tarea es trabajar para que dentro de 10 años lo raro sea la eutanasia.

Exaudi: ¿Es la familia un pilar en esta reconstrucción?

Jaume Vives: Con la eutanasia aprobada, lo que va a pasar es que mucha gente se va a sentir una carga en su familia, pasando horas y horas en el hospital o en casa. Esto puede ser una bendición, según como lo mires, pero es una gran cruz también. Y esta gente, con una gran presión encima, va a decir que ya no quiere vivir más.

No me imagino esto en una familia fuerte, que se quiere, el hijo haciéndoselo al padre o viceversa. El amor dentro de una familia muchas veces hace más que un buen tratamiento. Éste es indispensable, hasta el punto que una mala aplicación puede hacerte que quieras morir. El buen tratamiento consigue que estés bien dentro de la familia.

La familia es donde se vive primeramente el amor, en la intimidad, donde los hombres se hacen fuertes y uno puede ser libre.