El Papa recuerda el aniversario de la elección de san Juan Pablo II

Y fiestas litúrgicas de san Juan XXIII, santa Teresa de Ávila y santa Eduviges de Silesia

Papa elección Juan Pablo II
San Juan Pablo II © Vatican Media

En la audiencia general de hoy, miércoles 13 de octubre de 2021, en sus habituales saludos a los fieles de lengua polaca, el Papa Francisco ha recordado que esta semana se celebra el aniversario de la elección de san Juan Pablo II y las fiestas litúrgicas de san Juan XXIII, santa Teresa de Ávila y santa Eduviges de Silesia.

El Santo Padre ha descrito que la vida de estos santos “son claros ejemplos de libertad cristiana”, tema centran sobre el que ha fundamentado su catequesis de hoy en la Audiencia general, basándose en la Carta de san Pablo a los Gálatas. “La experiencia de estos santos recuerda que no hay libertad sin responsabilidad y sin amor a la verdad. Y la mayor realización de la libertad es la caridad, que se concreta en el servicio”, ha concluido el Papa.

Abrir las puertas a Cristo

En un artículo, Vatican News relata una de las frases para el recuerdo dirigidas a los fieles por san Juan Pablo II, el 22 de octubre de 1978, su primer día como Sumo Pontífice: “¡No temáis! ¡Abrid, más todavía, abrid de par en par las puertas a Cristo!” Los eminentísimos cardenales, expresó el papa de los jóvenes desde del balcón vaticano, “han llamado a un nuevo obispo de Roma, lo han llamado de un país lejano, lejano pero siempre tan cercano por la comunión en la fe y la tradición cristiana”.

“¡Oh Cristo! ¡Haz que yo me convierta en servidor, y lo sea, de tu única potestad! ¡Servidor de tu dulce potestad! ¡Servidor de tu potestad que no conoce ocaso! ¡Haz que yo sea un siervo! Más aún, siervo de tus siervos”, clamó el Santo Padre al cielo. Y también dijo: “¡Hermanos y hermanas! ¡No tengáis miedo de acoger a Cristo y de aceptar su potestad! ¡Ayudad al Papa y a todos los que quieren servir a Cristo y, con la potestad de Cristo, servir al hombre y a la humanidad entera!”.

Que Cristo hable al hombre

En la homilía de comienzo de su pontificado, el nuevo Obispo de Roma se refirió a la condición vulnerable del ser humano, que con frecuencia “no sabe lo que lleva dentro, en lo profundo de su ánimo, de su corazón. Muchas veces se siente inseguro sobre el sentido de su vida en este mundo. Se siente invadido por la duda que se transforma en desesperación”. De ahí su imploración: “¡Permitid que Cristo hable al hombre! ¡Sólo Él tiene palabras de vida, sí, de vida eterna!”.

El mismo 22 de octubre de 1978, describe Vatican News, san Juan Pablo II recordó en su homilía que toda la Iglesia celebraba la “Jornada Misionera mundial, es decir, ora, medita, trabaja para que las palabras de vida de Cristo lleguen a todos los hombres y sean escuchadas como mensaje de esperanza, de salvación, de liberación total”.

San Juan Pablo II

Karol Józef Wojtyla, elegido Papa el 16 de octubre de 1978, nació en Wadowice, Polonia, el 18 de mayo de 1920. Fue el menor de los tres hijos de Karol Wojtyla y Emilia Kaczorowska, que falleció en 1929. Su hermano mayor, Edmund, médico, murió en 1932 y su padre, suboficial del ejército, en 1941.


A los nueve años recibió la Primera Comunión y a los 18 el sacramento de la Confirmación. Terminados los estudios en la escuela superior de Wadowice, en 1938 se inscribió en la Universidad Jagellónica de Cracovia. Cuando las fuerzas de ocupación nazis cerraron la Universidad en 1939, el joven Karol trabajó (1940-1944) en una cantera y luego en la fabrica química Solvay para poder subsistir y evitar la deportación a Alemania.

A partir de 1942, sintiéndose llamado al sacerdocio, asistió a los cursos de formación del seminario mayor clandestino de Cracovia, dirigido por el Arzobispo Adam Stefan Sapieha. Al mismo tiempo, fue uno de los promotores del “Teatro Rapsódico”, también clandestino. Después de la guerra, continuo sus estudios en el seminario mayor de Cracovia, abierto de nuevo, y en la Facultad de Teología de la Universidad Jagellónica, hasta su ordenación sacerdotal, en Cracovia, el 1 de noviembre de 1946.

El 4 de julio de 1958, el Papa Pío XII lo nombró obispo auxiliar de Cracovia y titular de Ombi. Recibió la ordenación episcopal el 28 de septiembre de 1958 en la catedral de Wawel (Cracovia), de manos del Arzobispo Eugeniusz Baziak. El 13 de enero de 1964 fue nombrado arzobispo de Cracovia por el Papa Pablo VI, que lo creó cardenal el 26 de junio de 1967.

Participó en el Concilio Vaticano II (1962-1965), contribuyendo especialmente en la elaboración de la constitución Gaudium et spesEl cardenal Wojtyla participó en las cinco asambleas del Sínodo de los Obispos, anteriores a su Pontificado. Fue elegido Papa el 16 de octubre de 1978 y el 22 de octubre dio inicio a su ministerio como Pastor Universal de la Iglesia.

San Juan Pablo Il realizó 146 visitas pastorales en Italia y, como Obispo de Roma, visito 317 de las 332 parroquias con que cuenta Roma en la actualidad. Realizó 104 viajes apostólicos por el mundo, expresión de la constante solicitud pastoral del Sucesor de Pedro por todas las Iglesias. Entre sus principales documentos se encuentran 14 Encíclicas, 15 Exhortaciones apostólicas, 11 Constituciones apostólicas y 45 Cartas apostólicas. Al Papa Juan Pablo II se deben también 5 libros.

Desde 1978 convoco 15 asambleas del Sínodo de los Obispos: 6 generales ordinarias (1980, 1983, 1987, 1990,1994 Y 2001),1 asamblea general extraordinaria (1985) y 8 asambleas especiales (1980, 1991, 1994, 1995,1997,1998 [2] Y 1999). El 13 de mayo de 1981, en la Plaza de San Pedro, sufrió un grave atentado. Salvado por la mano maternal de la Madre de Dios, tras una larga convalecencia, perdonó a su agresor y, consciente de haber recibido una nueva vida, intensificó sus compromisos pastorales con heroica generosidad.

Murió en Roma, en el Palacio Apostólico Vaticano, el sábado 2 de abril de 2005, a las 21h 37m, la víspera del Domingo in Albis o de la Divina Misericordia, fiesta instituida por él. Los funerales solemnes en la Plaza de San Pedro y la sepultura en las Grutas Vaticanas fueron celebrados el 8 de abril. El Papa Francisco celebró el rito de canonización de Juan Pablo II  el 27 de abril de 2014.