Puerto Rico: Carta de obispos por aumento de violencia

“La violencia nace donde se ha quebrado la paz del alma”

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Obispos de Puerto Rico © CELAM

Los obispos de la Conferencia Episcopal de Puerto Rico (CEP) publicaron el pasado 27 de agosto de 2021 una extensa Carta Pastoral por su preocupación ante el gran aumento de la violencia en la isla, generada no solo con “el trasiego de drogas sino, también, cuando se repiten los asesinatos contra mujeres, hijos, hermanos y otros miembros dentro de las mismas familias”.

Según informó ayer, último día del mes de agosto, el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) en una nota, los prelados han señalado que “la violencia nace donde se ha quebrado la paz del alma y se ha perdido la esperanza de mejorar la calidad de vida. Desde allí se empiezan a lastimar las relaciones básicas: con Dios, con nosotros mismos, con los demás y con la naturaleza”, por lo que han instado a convertirse en artesanos de la paz.

Por ello “nos toca aportar a la reconstrucción del tejido social, religioso, ético y cultural de este pueblo, con esfuerzo diario y constante, para que emerja una paz genuina. Toca al Estado, con la ayuda de los ciudadanos y comunidades, construir una sociedad justa en un ambiente de armonía y paz para todos”.

Solidaridad

El CELAM cuenta que la CEP recuerda en su documento pastoral que “el Papa Francisco, en su carta encíclica Fratelli Tutti, se centra en la referencia a la parábola del buen samaritano (Lc 10, 25-­‐37). Allí nos recuerda el camino de sanación que el Evangelio nos propone: la compasión, la acogida, el diálogo y la reconciliación, de modo que nadie se considere enemigo de nadie”.


Todo ello pasa por el reconocimiento de “nuestras posibles actitudes violentas”, para lo cual “se requiere un acto de humildad, para darnos cuenta de quiénes somos y cómo nos sentimos y pedir la ayuda fraternal y profesional siempre que haga falta”, y, “en el fondo, para superar la violencia, debemos preguntarnos, no en primer lugar por lo que nos han hecho, sino por lo que somos y de dónde vienen nuestras reacciones”, han argumentado.