“¿El centro de nuestra existencia es realmente Jesús?”

Resumen de sus palabras en español

centro existencia Jesús
Audiencia general 1 septiembre 2021 © Vatican Media

En la audiencia general de esta mañana, primera del mes de septiembre, el Papa Francisco ha explicado que la pregunta que san Pablo hace a los “Gálatas ignorantes” es también una pregunta pertinente que nos afecta a todos: “¿El centro de nuestra existencia es realmente Jesús, su persona, su mensaje?”.

Hoy, 1 de septiembre de 2021, el Santo Padre ha presidido la audiencia general en el Aula Pablo VI del Palacio Apostólico vaticano, transmitida en directo, con presencia de fieles, adaptándose a las medidas de prevención frente a la COVID-19, y ha continuado con el ciclo de catequesis sobre la carta de san Pablo a los Gálatas, titulada “Gálatas ignorantes”.

Jesucristo, nuestra confianza

Durante el resumen en español de su catequesis, el Pontífice ha señalado que “en la Carta de san Pablo a los gálatas, que hoy seguimos profundizando, el Apóstol, sin medias tintas y llamándolos ‘ignorantes’, hace ver a los cristianos de esa comunidad un error que tendrá para ellos graves consecuencias. Les pregunta en qué o en quién quieren poner su confianza: ¿En Jesucristo, que por ellos fue crucificado, resucitó y actúa en la comunidad a través del Espíritu Santo, o en una serie de meros preceptos y tradiciones?”.


San Pablo, concluye, “alecciona a los gálatas, y también a nosotros, recordándoles sus inicios en la fe, cómo encontraron y adhirieron a Jesús gracias a su predicación y cómo, fruto de esta fe, el Espíritu había suscitado en la comunidad la caridad y los carismas. ¿Podía ser todo ello fruto del cumplimiento de ciertos preceptos? ¿No era Dios el que lo hacía posible? ¿Por qué entonces ellos habían caído en el engaño del formalismo?”.

Constructores de la unidad

Por último, el Sucesor de Pedro saludó a los fieles de lengua española: “Veo que hay unos uruguayos allí. Los animo a dejarse trasformar por la gracia que han recibido de Cristo y a responder de forma adulta a la llamada de Jesús, que los envía al mundo como testigos misioneros, para la obra de la evangelización. Que Dios los bendiga. Muchas gracias”.