El Papa: Que el Señor libere a la familia humana del flagelo de la guerra

Palabras del santo Padre después del Ángelus

Vatican Media

El 19 de julio se cumplirán 80 años del bombardeo que sufrió Roma, quedando destruidos algunos barrios, como el de San Lorenzo, el venerable Papa Pio XII, visitó esos barrios, quiso estar entre la gente devastada. Es así como Francisco recordó ese momento, después del rezo del Ángelus de este domingo 16 de julio de 2023, un aniversario que “por desgracia”, también hoy se repite.

Estas fueron las palabras del Papa después de la oración mariana, ofrecidas por la Oficina de Prensa de la Santa Sede:

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Palabras del Papa

Queridos hermanos y hermanas,

os saludo a todos vosotros, romanos y peregrinos de varios países.

Saludo a las Hermanas Misioneras de Nuestra Señora de los Apóstoles, reunidas en Roma para su Capítulo General.


Envío de corazón mi saludo a la Comunidad Cenáculo, que desde hace 40 años es lugar de acogida y promoción humana; bendigo a la madre Elvira, al obispo de Saluzzo y a todas las hermandades y a los amigos. ¡Es hermoso lo que hacéis y es hermosos que existáis! ¡Gracias!

Quiero recordar que hace ochenta años, el 19 de julio de 1943, algunos barrios de Roma, especialmente San Lorenzo, fueron bombardeados, y el Papa, el venerable Pío XII, quiso ir en medio del pueblo devastado. Lamentablemente también hoy estas tragedias se repiten. ¿Cómo es posible? ¿Hemos perdido la memoria? El Señor tenga piedad de nosotros y libere a la familia humana del flagelo de la guerra. En particular rezamos por el querido pueblo ucraniano, que sufre tanto.

Deseo saludar y dar las gracias a todas las parroquias que en este periodo realizan actividades de verano con los niños y los jóvenes – también en el Vaticano hay una muy apreciada -. ¡Gracias a los sacerdotes, a las monjas, a los animadores y a las familias! En este contexto dirijo un saludo para la próxima edición del Giffoni Film Festival, donde los protagonistas son los muchachos y los jóvenes.

Os deseo a todos un feliz domingo. Por favor, no os olvidéis de rezar por mí: yo lo hago por vosotros. Buen almuerzo y hasta pronto.