La Academia de Líderes Católicos concluye su primera escuela de líderes en el corazón de la amazonia Peruana

La formación se realizó del 29 de enero al 2 de febrero en el corazón de la amazonia

La Academia de Líderes Católicos ha concluido con éxito su primera escuela de líderes en el corazón de la Amazonía Peruana. Esta iniciativa sin precedentes tuvo lugar del 29 de enero al 2 de febrero, en los Vicariatos de San José del Amazonas y de Pucallpa. En un esfuerzo conjunto con la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, la Universidad Finis Terrae de Chile y ACN Internacional, la academia llevó a cabo esta formación en tres modalidades dirigidas a profesionales docentes, adultos y escolares.

Durante tres días, del 29 al 31 de enero, en la localidad de Iquitos, ubicada en plena Amazonía peruana, se llevaron a cabo simultáneamente dos escuelas. Una de ellas estuvo dedicada a la formación de más de 100 docentes del Vicariato Apostólico de San José, una zona donde muchos profesores deben cruzar el río Amazonas para impartir clases. La segunda escuela fue exclusiva para jóvenes de la escuela Padre Colegio Severino Deshaies (Aucayo), ubicada en una zona de difícil acceso a la que solo se puede llegar a través del río Amazonas en bote.

En la ciudad de Pucallpa, se llevó a cabo la Escuela de Líderes para Adultos y Escolares, congregando a aproximadamente 60 personas interesadas en recibir formación en temas fundamentales como la dignidad humana, los derechos humanos y la promoción de una cultura del encuentro. Además, participaron en talleres enfocados en el trabajo en equipo y el uso responsable de las redes sociales. Ambas escuelas utilizaron el DOCAT como documento de trabajo, lo que les permitió profundizar en los conocimientos de la doctrina social de la Iglesia de manera más exhaustiva.

Claudia Zarzosa, subdirectora de la Academia, compartió su impresión sobre esta experiencia destacando su carácter impactante: “Sin duda, esta vivencia ha sido extraordinaria, permitiéndonos reafirmar el compromiso de la Academia Internacional de Líderes Católicos con el mensaje del Papa Francisco, el cual nos insta a dirigirnos hacia las periferias para asistir a las comunidades más necesitadas. A través de un esfuerzo conjunto, la academia ha desplazado su labor desde distintas regiones para abocarse a la formación, enriqueciéndola con valores intrínsecos a nuestra doctrina social de la Iglesia. Nos esforzamos por llevar la esperanza y el mensaje del Evangelio, fortaleciendo los liderazgos en los sectores más desfavorecidos. En estos contextos, es crucial el compromiso de cada ciudadano en la protección del medio ambiente y en la salvaguarda de la riqueza cultural y diversidad que los distingue. La academia renueva su compromiso con estas poblaciones necesitadas y, personalmente, extraigo de esta experiencia un aprendizaje invaluable. Descubrir esta realidad me hace reflexionar sobre el mensaje del Evangelio dirigido a los más humildes y desposeídos, donde reside la mayor esperanza, alegría y el deseo de buscar la verdad para ponerla en práctica. Me despido de esta experiencia llena de gratitud, satisfacción y orgullo al constatar el compromiso de hombres, mujeres y jóvenes en mi país con el futuro y la promoción del bien común”.

Luis Ernesto Gutiérrez, director de Escolares Lima, compartió su satisfacción y reflexiones sobre el trabajo realizado: «Me encuentro complacido con el trabajo llevado a cabo, el cual ha sido realizado con esmero y dedicación. Esta ha sido una gira verdaderamente excepcional, marcada por el arduo esfuerzo y el testimonio de cada uno de los participantes. En el transcurso de esta experiencia, hemos vivido la sinodalidad en la misión, permitiendo que cada individuo aporte desde sus propias fortalezas. Es digno de destacar la respuesta positiva y la excelente organización tanto del Vicariato Apostólico de San José del Amazonas como del Vicariato Apostólico de Pucallpa. Presenciar la dinámica comunidad en movimiento, con múltiples grupos que se han unido y deseado participar en la Escuela de Líderes Católicos, tanto adultos como adolescentes, ha sido extraordinario. Nos hemos considerado meros instrumentos, dispuestos a ser portavoces de un mensaje, y ha sido gratificante observar la respuesta, la acogida y, sobre todo, el deseo de que este trabajo continúe. Expreso mis felicitaciones a todos aquellos que han hecho posible esta exitosa gira y acompañamiento de la Escuela de Líderes Católicos, y animo tanto a nuestros visitantes extranjeros como a los locales a que la escuela siga creciendo y difundiendo el magisterio de la Iglesia, comprometiéndose en la búsqueda del bien común».


Marisol Pérez Tello, ex ministra de Justicia, compartió sus impresiones sobre esta experiencia: «Ha sido sumamente interesante. Se evidenciaron dinámicas distintas tanto en Iquitos como en Pucallpa. En Pucallpa, la mayoría de los participantes eran jóvenes y adultos vinculados a la iglesia, mientras que en Iquitos el grupo con el que interactué estaba compuesto por profesores. Esto implicó diferentes demandas y expectativas de respuesta. Se observó un notable interés y entusiasmo por parte de los asistentes. Personalmente, no puedo dejar de reflexionar sobre la situación del país. Existe una coincidencia en sentir indignación, dolor y tristeza, pero también la convicción de que todos estamos llamados a una vida trascendente, más allá de lo puramente existencial, mediante el compromiso con el cambio. Considero que esa es la finalidad de la academia: que cada individuo contribuya como un factor de cambio en su sector y en la sociedad en general».

En la zona de Iquitos, la Maestra Wendy Chu, directora del colegio Padre Colegio Severino Deshaies (Aucayo), describió la escuela de líderes escolares como una experiencia sumamente enriquecedora: “Hemos sido bendecidos con un taller sobre liderazgo católico para nuestros estudiantes, quienes se han beneficiado enormemente de esta experiencia. El taller los ha motivado, los ha involucrado y les ha asignado pequeñas tareas que los han incentivado a lograrlas. Por ejemplo, la ayuda social, que es fundamental para ellos, no solo para asistir a sus compañeros, sino también a personas de la comunidad. Esto los capacita para ser líderes sensibles ante las necesidades de los demás. Agradezco a la ODEC y a la Academia Internacional de Líderes Católicos por brindarnos esta oportunidad que ha sido muy valiosa para nuestra institución educativa. Este taller ha aportado significativamente a nuestros estudiantes y a nosotros, como directivos, nos ha permitido descubrir aspectos que desconocíamos y nos motiva a guiar a nuestros estudiantes para que se conviertan en líderes ejemplares en este camino”.

En la zona de Pucallpa, María Quispe, asistente a la Escuela de Líderes, expresó su gratitud por la experiencia: “Agradezco sinceramente a todos ustedes, que han viajado desde lugares lejanos, especialmente al Señor, nuestro Dios Padre. La idea de venir de un país a otro despierta emociones profundas. Agradezco todas las perspectivas que nos han brindado, especialmente aquellas relacionadas con la sinodalidad promovida por el Papa, que nos impulsa a acercarnos a nuestros hermanos indígenas con amor, sabiduría y comprensión. Es fundamental mantener ese amor hacia ellos y buscar formas de unión como seres humanos, reconociendo que todos somos iguales y tenemos la capacidad de avanzar juntos. Debemos cuidar nuestra casa, este hogar que Dios nos ha confiado mientras vivamos en esta tierra”.

La Academia Internacional de Líderes Católicos, con presencia en 40 diócesis de América Latina, Estados Unidos y España, ha brindado formación a más de 35 mil exalumnos a través de programas tanto presenciales como virtuales. Esta reciente incursión en la Amazonia es un testimonio claro de su compromiso constante con la formación integral y la difusión de la Doctrina Social de la Iglesia en diversas realidades pastorales.