Brasil: Obispos agradecen cercanía del Papa durante pandemia

Carta desde su 58ª Asamblea Plenaria

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Papa Francisco © Vatican Media

Los obispos de Brasil reunidos virtualmente en la 58ª Asamblea General de la Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil – CNBB, del 12 al 16 de abril, agradecen en una carta la “la cercanía paternal y misericordiosa” del Papa Francisco mostrada al pueblo brasileño durante la pandemia.

En la misiva, difundida por el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) y dirigida a Su Santidad, se reconocen los numerosos esfuerzos del Santo Padre “por construir la unidad en la Iglesia y con otros cristianos y por fomentar el diálogo con otras religiones no cristianas y con la pluralidad de culturas”, algo que pudo ser percibido “de manera ejemplar”, en el reciente viaje a Irak del Papa: “Por los caminos de la fe de Abraham, y en los fructíferos diálogos emprendidos allí por la paz y la concordia entre los pueblos, buscando también el bálsamo espiritual de las numerosas heridas causadas por los conflictos históricos en esa región”.

Del mismo modo, los miembros del episcopado expresan su gratitud por “los frutos y la buena repercusión eclesial y social” que ha generado la encíclica Fratelli tutti y el año dedicado al patriarca san José y de las familias. Para ellos, el Año de la Familia Amoris Laetitia, “será ciertamente una guía segura para nuestra acción evangelizadora de las familias. Sin descuidar también los esfuerzos de nuestra comunidad cristiana en la construcción de la gran familia humana, llamada a edificarse como casa de hermanos y hermanas, en el respeto, la amistad y el diálogo amoroso”.

Consecuencias del coronavirus

Los prelados señalan que el coronavirus “ha hecho aflorar la miseria, el sufrimiento y la precariedad en muchas regiones y diócesis de Brasil” y que los llamamientos mundiales del Santo Padre “en relación con el Pacto Mundial por la Educación y la Economía de Francisco están siendo difundidos y acogidos por los respectivos segmentos, con importantes y creativas adhesiones de la sociedad y de la Iglesia en Brasil”.

En este sentido, indican que en esta pandemia experimentan “situaciones de gran dolor”: “la fragilidad de nuestras políticas públicas, la incapacidad de nuestros gobiernos en el tratamiento de la pandemia, el negacionismo de una parte de los brasileños, la politización e ideologización de la pandemia, la imposibilidad de ritos y oraciones en ocasión del entierro de los muertos del COVID-19, causando aún mayor dolor a las familias”.


Por otro lado, no obstante, también resaltan “la solidaridad entre personas, familias y comunidades, las múltiples formas creativas de presencia entre quienes sufren la soledad y el abandono, especialmente los ancianos”. La emergencia sanitaria, añaden “nos ha educado a muchas acciones de caridad evangélica, para ayudar a los más vulnerables, en un hermoso y creativo pacto por la vida y por nuestro sufrido Brasil”.

Otros temas y renovación del CELAM

Asimismo, los pastores brasileños comparten con Francisco el tema de la 58ª Asamblea General de la CNBB, “La Iglesia como Casa de la Palabra de Dios. La casa de la palabra: animación bíblica de la vida y la pastoral en las comunidades eclesiales misioneras”, y manifiestan unirse al Pontífice “en los esfuerzos de purificación, conversión y justicia ante los casos de abusos cometidos por miembros de la Iglesia”. Para ello, se están estructurando los mecanismos de enfrentamiento a esas realidades.

La carta alude también al Sínodo para la Amazonía y a “Querida Amazonía”, que “repercuten en una nueva sensibilidad, gestos de solidaridad y nuevas atenciones pastorales”. Al mismo tiempo, destaca la importancia de la Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe, que pretende “celebrar, revisar y retomar las luces, perspectivas y esperanzas de la Conferencia de Aparecida”.

Dentro del programa de la 58ª Asamblea General de la CNBB, en la tarde del pasado martes 13 de abril, el CELAM, con la participación de su presidente, monseñor Miguel Cabrejos, su secretario general adjunto y los coordinadores de los cuatro nuevos centros que forman parte de la institución, presentaron el proceso de renovación de la entidad y la Asamblea Eclesial de la Iglesia de América Latina y el Caribe.