El Papa llega a Budapest para clausurar Congreso Eucarístico

Bienvenida en el aeropuerto

Budapest Papa Congreso Eucarístico
Bienvenida al Papa en el aeropuerto de Budapest, 12 septiembre 2021 © Vatican Media

El Papa Francisco ya se encuentra en Budapest, Hungría, para clausurar el 52º Congreso Eucarístico Internacional. Esta es la primera parada de su 34º viaje apostólico internacional, que incluye también Eslovaquia y cuyo lema es “Con María y José en el camino hacia Jesús”.

En la rueda de prensa en el avión de vuelta de su viaje a Irak, el pasado mes de marzo, el Santo Padre expresó su intención de acudir a esta ciudad. “Ahora tendré que ir a Hungría a la Misa final del Congreso Eucarístico Internacional, no una visita al país, sino solo para la Misa”. Y añadió: “Pero Budapest está a dos horas en coche de Bratislava, ¿por qué no hacer una visita a Eslovaquia? Así es como salen las cosas…”. Francisco confirmó su viaje en el Ángelus del pasado 4 de julio: “Del 12 al 15 del próximo septiembre, si Dios quiere, viajaré a Eslovaquia para realizar una visita pastoral (…). Antes [la mañana del domingo 12 de septiembre] concelebraré en Budapest la Misa conclusiva del Congreso Eucarístico Internacional”.

Los temas principales de esta peregrinación son el martirio y la represión, pero también la misión evangelizadora, tal como la enseñaron los apóstoles eslavos Cirilo y Metodio, así como el diálogo ecuménico e interreligioso y las cuestiones europeas. Asimismo, la Adoración Eucarística caracterizará la parada en Hungría, mientras que en Eslovaquia lo será la peregrinación en oración a Nuestra Señora de los Siete Dolores, según la intención de Su Santidad.

Bienvenida en el aeropuerto

En torno a las 7:45 (hora local y de Roma) de hoy, 12 de septiembre de 2021, el vuelo papal ha aterrizado en el Aeropuerto Internacional de Budapest procedente de Roma, tras recorrer 991 kilómetros. El nuncio apostólico y el jefe de protocolo húngaro subieron al avión por la escalera delantera para saludar al Santo Padre.

Después, el Papa ha sido recibido por el viceprimer ministro del país, Zsolt Semjén, al pie de la escalerilla del avión, el Pontífice ha saludado a las personas congregadas, entre los que se encontraban unos niños que le han entregado unas flores. Acto seguido, Su Santidad y Semjén se dirigieron a sus respectivos coches.

Programa en la ciudad

El Pontífice se trasladó después hacia el Museo de Bellas Artes de Budapest para reunirse con el presidente de la República, János Áder, y con el primer ministro, Viktor Orbán. En el mismo lugar, el Obispo de Roma participará primero en un encuentro con los obispos en el Museo de Bellas Artes de Budapest y después con los representantes del Consejo Ecuménico de las Iglesias y algunas comunidades judías.

A las 11:30 el Papa Francisco presidirá la Misa de clausura del 52ª Congreso Eucarístico. A las 14:30 está prevista la ceremonia de despedida desde el aeropuerto de Budapest para salir a Bratislava, capital de Eslovaquia, país en el que permanecerá hasta el próximo 15 de septiembre.

Budapest

La capital y ciudad más grande de Hungría (1.774.000 habitantes), conocida como la “Perla del Danubio”, está situada en el centro-norte del país, a orillas del río Danubio, cuyo curso atraviesa la capital. Los límites de la ciudad moderna se trazaron en 1873 con la unificación de las ciudades de Buda y Óbuda en la orilla oeste y Pest en la llanura de la orilla este.

Además de ser la sede del gobierno, Budapest siempre ha sido una importante ciudad europea, un centro político, cultural e industrial, así como un centro de transporte y un popular destino turístico.


La unión entre Austria y Hungría tuvo lugar en 1867. Bajo los Habsburgo, la ciudad floreció y se construyeron numerosas iglesias y edificios públicos. En 1873, con la unificación definitiva de Óbuda, Buda y Pest, Budapest era, después de Viena, la ciudad más importante del Imperio Austrohúngaro.

Al final de la I Guerra Mundial, con el Tratado de Saint-Germain-en-Laye, Austria reconoció la independencia de Hungría y, tras la II Guerra Mundial, Budapest se convirtió en la capital de un Estado húngaro satélite de la Unión Soviética.

En 1956, la ciudad se levantó contra el dominio soviético, pero el movimiento revolucionario fue reprimido violentamente por las tropas del Ejército Rojo. Entre 1956 y 1988, bajo el gobierno de János Kádár, se impone un comunismo semiliberal conocido como “comunismo goulash” y comienza la liberalización de la economía húngara. El comunismo se derrumbó en 1989, y el país se convirtió en miembro de la Unión Europea en 2004.

Principales monumentos de la ciudad: la colina del Castillo de Buda, donde se encuentra el Palacio Real, incluido en la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO desde 1987; la Galería Nacional; la Iglesia de Matías (siglo XIII); el Bastión de los Pescadores, la fortaleza de la ciudad, que ofrece una vista panorámica del Danubio y del barrio de Pest; y, en la histórica Óbuda, los restos del antiguo Aquincum y sus baños.

Archidiócesis de Esztergom- Budapest

Data del siglo X y el 31 de mayo de 1993 se le añadió el nombre de Budapest. Cuenta con una extensión de 1543 km2 y 2.060.130 habitantes, de los cuales, 1.238. 300 son católicos.

La archidiócesis cuenta con 158 parroquias; 26 iglesias; 240 sacerdotes diocesanos (1 ordenado el año pasado); 144 sacerdotes regulares residentes en la diócesis (2 ordenados el año pasado); 33 diáconos permanentes; 37 seminaristas en los cursos filosóficos y teológicos; 184 religiosos y 319 religiosas; 73 instituciones educativas; 31 instituciones benéficas. El año pasado se celebraron 5.550 bautismos en esta circunscripción eclesiástica.

Arzobispo de Esztergom- Budapest

El arzobispo metropolitano de Esztergom-Budapest es el cardenal Péter Erdő. Nacido en Budapest el 25 de junio de 1952, fue ordenado sacerdote el 18 de junio de 1975.

Fue elegido obispo titular de Puppi el 5 de noviembre de 1999.Consagrado el 6 de enero de 2000, fue promovido a Esztergom-Budapest el 7 de diciembre de 2002. El 21 de octubre de 2003 san Juan Pablo II lo creó cardenal, con el título de Santa Balbina.