La Sagrada Familia recibió a 4.707.641 visitantes en el 2023

El máximo exponente de la arquitectura modernista y obra de Antonio Gaudí cierra un 2023 con unos datos inmejorables

En el 2023, la Basílica de la Sagrada Familia contabilizó un total de 4.707.641 visitantes, una cifra que se acerca a la del 2019, que se cerró con 4.717.881 visitas, y que también supone una recuperación progresiva con respecto al 2022, en el que entraron en la Basílica un total de 3.781.845 personas.

Como la financiación de la obra es de origen 100 % privado y, por tanto, la fuente de los ingresos para la construcción depende de la venta de entradas, esta progresiva normalización de las visitas con respecto al 2019 mantiene el curso favorable para la finalización del proyecto de Gaudí.

La pandemia del Covid-19 paralizó a las masas de turistas que se acercaban hasta la Sagrada Familia de Barcelona para admirar una de las obras arquitectónicas más importantes de nuestro país y del mundo entero. En el último año la Catedral ha registrado más de cuatro millones de visitas. El número se parece cada vez más al que existía pre pandemia y esto se traduce en una recuperación progresiva. La financiación de la obra es de origen 100% privado y la fuente de ingresos de la Catedral depende del número de visitantes que reciba, de la venta de entradas.

En noviembre de este pasado 2023, tuvo lugar la bendición de las cuatro nuevas torres de la Sagrada Familia. Se trata de las torres de los evangelistas. Miden 135 metros y son las terceras que poseen mayor altura del templo. Los símbolos de los cuatro evangelistas: el toro, el águila, el ángel en figura humana y el león coronan el final de cada una de las columnas.


Un arquitecto con un testimonio de fe

Hombre de fe, gran observador de la naturaleza y arquitecto genial, Antoni Gaudí se ha convertido en una figura universal de la arquitectura moderna. Su aportación a esta disciplina rompió con los esquemas establecidos. El testimonio de fe que ofreció en vida, ha quedado plasmado en su obra más importante, la Sagrada Familia de Barcelona.

Gaudí experimentó su conversión al prepararse para la construcción de esta edificación con un período de ayuno. Según explicó el propio arquitecto, siguió el consejo de Fray Angelico, que explicaba que «quien desee pintar a Cristo sólo tiene un camino: vivir con Cristo«.

Desde entonces, se entregó a una vida humilde y centrada en el Señor, a quien encontró la mejor forma de servir en la construcción de la Sagrada Familia, proyecto al que dedicó los últimos doce años de su vida y que, todavía hoy, cuarenta años después de su muerte, se encuentra en construcción.