Card. Filoni: La paz en Palestina es posible sólo si se reconoce el derecho de todos

«La convivencia pacífica es posible pero debe construirse»

La paz en Tierra Santa, el conflicto palestino-israelí, Hamás y la derecha israelí, la salida posible, fueron algunas de las cuestiones que vinieron a flote y a las que respondió el cardenal Fernando Filoni en un encuentro con periodistas, en Roma hace pocos días,  para explicar la Orden Ecuestre de la Santo Sepulcro de Jerusalén. Así como el importante apoyo que esta institución da a quienes viven en Tierra Santa, también desde el punto de vista económico, con unos de 13 millones de euros al año, gracias a la contribución de sus casi 30 mil miembros.

Sobre la situación en Oriente Medio, el cardenal reiteró sin dudar: «La convivencia pacífica es posible pero debe construirse». “Necesitamos poner fin a esas formas de prejuicios difíciles de extirpar. La política y la actitud de cada uno pueden contribuir a construir y establecer un clima diferente» dijo.

Porque “las acciones violentas de un lado o del otro provocan situaciones de conflicto que luego se vuelven enormes. Nos mantenemos en el principio de que la paz es posible solo si se hace en la justicia y en el reconocimiento de los derechos de todos, de todos».

Aunque inmediatamente aclaró que la Orden del Santo Sepulcro “no es artífice de la paz”, “nosotros podemos ser los obreros”. Indicando por ejemplo que «en nuestras escuelas, donde tenemos 20 mil estudiantes, de los cuales más de la mitad son musulmanes, conviven niños y niñas cristianos, me parece que esto es construir la paz desde la raíz».

Esto demuestra que “se puede vivir en paz en Jerusalén, especialmente en la Antigua Ciudad Santa, donde viven musulmanes, cristianos y judíos. Si hemos logrado demostrar que la paz es posible, esto se puede decir de toda la Tierra Santa».

Su Eminencia también recordó su visita del año pasado y el inicio de éste como «un signo de solidaridad, de cercanía de afecto, en un momento en el que no hay ni turistas ni peregrinos», por lo que «con todos los comercios cerrados, con gente que no trabaja.»

¿Ante la pregunta si hay persecución a los cristianos? El cardenal indicó que “no podemos hablar de persecución, pueden haber situaciones de discriminación o expresiones de desprecio, que forman parte de las manifestaciones de judíos o musulmanes. Pero que también son comunes en nuestras sociedades europeas. No de instituciones sino de pequeños grupos o de individuos.»

Esta situación «no disminuye el compromiso que la Orden tiene con Tierra Santa y con los ciudadanos que allí viven», subrayando que este territorio «pertenece a judíos, musulmanes y cristianos».

“Por esta razón no podemos dejar de aceptar -prosiguió el cardenal Filoni – el derecho a la seguridad que tiene Israel para vivir en su país, así como no podemos dejar de aceptar del mismo modo, el derecho de los musulmanes a vivir en esta tierra. Y lo mismo vale con los cristianos y otras minorías que viven en Tierra Santa».


El Gran Maestre de la Orden Ecuestre del Santo Sepulcro precisó que “a Israel no se le puede negar el derecho a existir, nadie puede decir que está por la destrucción de Israel, esto genera nueva violencia. Así como nadie puede decir que hay que destruir a los palestinos. En cambio, si se elige la fórmula de dos Estados, un Estado o cuál forma es mejor, se discute en una mesa y discutir. Pero el derecho a la existencia debe ser garantizado y defendido por todos».

En el mundo palestino -prosiguió el Prefecto Emérito de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos- hay realidades duras, como en el mundo israelí. Entonces es necesario vaciar lentamente este odio, esas tensiones, porque si no se vacían entonces resulta casi natural que se inflamen y luego exploten. La paz es posible, debemos desearla, trabajar por ella, no debemos cometer injusticias porque de lo contrario nunca alcanzaremos la paz.»

El Gran Canciller Emérito de la Pontificia Universidad Urbaniana de Roma indicó también que «cuando en el mundo palestino uno se encuentra con que su tierra está siendo ocupada, ilegalmente, que es tierra palestina, esto no es normal, es un acto de violencia. No se trata de crear un equilibrio entre un lado y el otro, sino que estos desequilibrios, estas violencias, provocan situaciones de conflicto que luego se vuelven enormes. Nos mantenemos en el principio de que la paz es posible si se hace en la justicia y en el reconocimiento de los derechos de todos, de todos».

Interrogado sobre el aumento de las manifestaciones contra los israelíes, el cardenal indicó que «el antisemitismo crece cuando aumenta la violencia». Agregó que «hay dos realidades que existen en los dos territorios, algunas son realidades hermosas, otras no. Hay que eliminar los motivos de fricción. Entonces tener dos Estados o solo uno, o lo que se considere, depende sobre lo se quiera planificar, pero con los todos derechos de ambos, sin ciudadanos de primera, segunda o tercera clase».

“¿Cuántos cristianos han vivido durante siglos en Oriente Medio -recordó el purpurado- con el concepto de ‘dhimmitud’, el impuesto que los cristianos deben pagar en el mundo musulmán. El dhimmi como cultura existe». Y contó: «En Irak un cristiano me dijo, tuve un accidente, YO tenía razón pero fui a un juez y me dijo que eres cristiano, entonces tu palabra vale menos que la de un musulmán».

Sobre el ‘derecho divino’ a apoderarse de un territorio o de algo, el cardenal Filoni explicó que es difícil utilizar este principio, porque «antes de ser tierra de judíos era una tierra donde vivían otros». En cambio «hoy el principio es que quien vive, nace o viene a esta tierra tiene derecho a estar en paz».

Para ingresar a la Orden Ecuestre del Santo Sepulcro

El número uno de la Orden explicó que somos menos de treinta mil, cada año se nos unen unos mil nuevos caballeros o damas que hacen un itinerario de preparación de no menos de un año, que son presentados por alguien y entran mas bien por atracción. Sobre las exigencias para entrar, indicó: «Las mismas que la Iglesia pide a todo buen cristiano: que sea católico, que quiera participar en este compromiso hacia Tierra Santa, que quiera entrar en esta espiritualidad, que está al servicio de la propia Iglesia local y que aporta la aportación de un testimonio».

«No estamos pidiendo – añadió – que sean superhombres o supermujeres, sino personas que caminen en la Iglesia con ese espíritu que todo cristiano debe tener, sobre todo si se siente vinculado al misterio fundamental de la Pasión, muerte y resurrección del Señor».

El cardenal consideró muy positivo el nombramiento de un cardenal en Tierra Santa, realizado por el Papa Francisco por primera vez en la historia, ya que permite «incluso a la Iglesia madre de Jerusalén, con su máximo representante, participar en la elección del sucesor del apóstol Pedro”.